
Un logotipo —coloquialmente también llamado logo— es un signo gráfico que identifica a una empresa, un producto comercial, un proyecto, o en general, a cualquier entidad pública o privada.[1] Antes Históricamente, los artesanos del barro, del cristal, de la piedra, los fabricantes de espadas y artilugios de hierro fino, así como los impresores, utilizaban marcas para señalar su autoría.
Tipos de logotipos
En el ámbito del diseño gráfico[2] y la identidad corporativa, existen distintos tipos de logotipos que las empresas pueden utilizar para representar su marca:
- Logotipo: Es un diseño que utiliza únicamente letras, ya sea el nombre completo de la empresa o una sigla. Este tipo de logotipo se basa en la tipografía y puede ser bastante sencillo o muy elaborado. Un ejemplo de logotipo es el de Coca-Cola, que utiliza su nombre escrito en una tipografía muy particular.
- Isotipo: Es un símbolo o icono que se utiliza para representar a la empresa. En este caso, el diseño no incluye texto. Un ejemplo de isotipo es el famoso logo de la manzana de Apple.
- Imagotipo: Es una combinación de un logotipo y un isotipo. En este caso, se utiliza una imagen y un texto que se combinan para formar el logo completo. Un ejemplo de imagotipo es el logo de Adidas, que combina las tres barras con el nombre de la empresa.
- Isologotipo: Es una versión del logo que combina un isotipo con el nombre de la empresa. En este caso, el isotipo y el texto están integrados en una sola imagen. Un ejemplo de isologotipo es el logo de Starbucks, que combina una imagen de una sirena con el nombre de la empresa.
Cada tipo de logotipo tiene sus propias ventajas y desventajas, y la elección dependerá de las necesidades y objetivos de la empresa. Por ejemplo, un logotipo puede ser más fácil de recordar si se utiliza el nombre completo de la empresa, pero puede ser más difícil de reconocer si la tipografía no es muy distintiva. Por otro lado, un isotipo puede ser muy llamativo y fácil de reconocer, pero puede ser menos efectivo para transmitir el nombre de la empresa. En última instancia, el objetivo es crear un logotipo que sea memorable, distintivo y representativo de la marca.
El logotipo como elemento de comunicación
Para que un logotipo resulte congruente y exitoso, debe ser conforme al principio fundamental del diseño donde «menos es más». Dicha simplicidad permite que sea:
- Legible - hasta el tamaño más pequeño.
- Escalable - a cualquier tamaño requerido.
- Reproducible - sin restricciones materiales.
- Distinguible - tanto en positivo como en negativo.
- Memorable - que impacte y no se olvide.
Las marcas construidas exclusivamente con letras llegan a tener tanta fuerza o más que aquellas que, si bien cuentan con un icono gráfico, requieren la asociación del texto para posicionarse desde el inicio; tal es el caso, por ejemplo, de las marcas de automóviles. Posteriormente, la imagen queda intrínsecamente asociada al sonido del nombre de la marca original.
El logotipo puede ser el eje afirmador de la propiedad privada a través del hecho de la autoría.
Un logotipo se diferencia por:
- La funcionalidad de un logotipo radica en su capacidad para comunicar el mensaje que se desea, como, por ejemplo: Somos una empresa responsable o Este producto es de alta calidad, y para conseguir esto se necesitan colores y formas que contribuyan a que el espectador final le dé esta interpretación.
- Un logotipo, en términos generales, requiere el uso apropiado de la semiótica como herramienta para lograr la adecuada comunicación del mensaje y la interpretación por parte del espectador más cercana a este mensaje. Así, por ejemplo, un círculo amarillo puede interpretarse de diferentes formas y dársele diferentes significados como sol, moneda, huevo, queso u otros, mientras que si se encuentra adyacente a la palabra "banco", ambos elementos, el círculo amarillo y la palabra banco, toman un solo significado: "Institución Bancaria". Es decir, el logotipo, al momento de representar una entidad o grupo de personas, lo más apropiado es que mantenga congruencia semiótica entre lo que se entiende y lo que realmente busca representar la imagen.
¿Qué es una simbología?
La simbología es el estudio de los símbolos o el conjunto de estos. Un símbolo, por otra parte, es la representación sensorial de una idea que guarda un vínculo convencional y arbitrario con su objeto. La noción de simbología se utiliza para nombrar al sistema de los símbolos que identifican a los diferentes elementos de algún ámbito. La electricidad, la química y la mecánica, entre otros ámbitos del conocimiento, tienen su propia simbología. Quien conoce la simbología de una especialidad, puede expresarse mediante los símbolos e interpretar diagramas o esquemas que apelen a los símbolos en lugar de las palabras. Es posible clasificar la simbología según su objeto de estudio o área de incumbencia.
Protección del diseño
Los logotipos y su diseño pueden estar protegidos por derechos de autor, a través de varias organizaciones de propiedad intelectual en todo el mundo que ponen a disposición los procedimientos de solicitud para registrar un diseño y darle protección legal. Por ejemplo, en el Reino Unido, la Oficina de Propiedad Intelectual (Reino Unido) rige los diseños registrados, las patentes y las marcas comerciales. Por lo general, es el diseño visual el que estará protegido, incluso si se reproduce en una variedad de otros colores o fondos.
Marcas corporativas
Isologo, imagotipo, isotipo y logotipo son varias tipologías posibles de la marca corporativa.
Véase también
- Derecho de autor
- Diseño gráfico
- Empaquetado neutro
- Imprenta
- Impresión
- Marca de impresor
- Marca personal
- Marca (registro)
- Reputación de marca
Referencias
- ↑ «logotipo». Diccionario Español de Ingeniería (1.0 edición). Real Academia de Ingeniería de España. 2014.
- ↑ «Programas para diseñar logos».
